Como ser exitoso. Es la pregunta para que todo el mundo quera tener la respuesta. En tu área de especialización seguramente tienes modelos de hombres y mujeres a seguir, en los cuales te gustaría convertirte cuando “seas grande”. Hemos compilado los 15 hábitos que todos ellos comparten y de los que se valieron para alcanzar el éxito. Poder cumplir con todos es un trabajo arduo pero posible. A continuación te los presentamos. Ponlos tú también en práctica y conviértete con el tiempo en la persona exitosa que deseas.
Las personas exitosas tienen mucha disciplina. Saben cuándo trabajar duro y cuándo disfrutar de su tiempo libre al 100%. Por lo general, no se dejan tentar por las redes sociales en momentos inoportunos. Así como lo hacen ellos, para ser efectivo tú también debes aprender a meterte de lleno en lo que estás haciendo, evitando los whatsapp, los emails y todo lo que sabes que te distrae.
Uno de los hábitos de las personas exitosas es el de la curiosidad y las ganas de aprender constantemente. Tienen arraigado un hábito de lectura muy fuerte, por lo general, de temas relacionados con lo que hacen. Las personas exitosas siempre buscan nuevas formas de mejorar a través del conocimiento. Son estudiantes de su propia profesión y no asumen que lo que saben es la verdad revelada. Se sienten desafiados por aprender cosas nuevas todos los días.
Para los amantes de quedarse hasta el último minuto en la cama, este hábito es el que más va a costar asumir. Las personas más exitosas madrugan, entre las 4.30 y las 5.30, para aprovechar mejor las primeras horas de la mañana y dedicarlas a cosas importantes, adelantar trabajo, ejercitarse, responder mails o planificar el día-mes-año. Si hoy por hoy te levantas a las 8, una buena manera de empezar a convertirte en madrugador es poner el despertador 15 minutos antes gradualmente.
Las personas más exitosas saben lo que quieren y planifican cómo llevarlo a cabo en el corto, mediano y largo plazo. Como ellos, puedes fijarte metas diarias, semanales, mensuales o anuales con las que te sientas desafiado y motivado, a medida que las vayas cumpliendo. La idea es que, como ellos, cada vez te pongas metas más ambiciosas y te vuelvas más efectivo al alcanzarlas. Estas metas serán las que te guíen en el trabajo que hagas todos los días.
Las personas exitosas odian tener pendientes. No les parece buena idea tener sus computadoras llenas de post-it de todos colores, que les indiquen muy llamativamente que tienen tareas que atender. Una batería de recordatorios habla de que estás procrastinando, es decir, estás postergando lo que debes hacer y te pierdes en detalles sin importancia. Por eso, como ellos, intenta cumplir con las tareas en el momento así evitarás tenerlas en la mente, ocupando espacio y sumándote preocupaciones.
Entre todas las virtudes de las personas más exitosas existe una que es tal vez la más envidiable: el optimismo. Estos líderes sociales y empresariales tienen sus mochilas cargadas de entusiasmo, energía y felicidad. Para esta gente los problemas son sólo oportunidades para aprender de los errores. Por eso, cuando algo les sale mal, estas personas eligen ver el lado positivo de la situación, eligen levantarse y volver a empezar. Quizás tengan que cambiar de camino pero se mantienen caminando hacia su meta. Tal nivel de automotivación sólo es posible cuando están verdaderamente comprometidos con lo que desean hacer, con sus metas y con el plan que se fijaron para alcanzarlas. Para inspirarse, también dedican un poco de su tiempo cada día a leer libros de autoayuda y citas motivacionales. ¡Y no les da vergüenza decirlo!
Una manera de mantenerse positivo es sentirse agradecido por todo lo que se tiene. Las personas exitosas trabajan para mejorar su inteligencia emocional y saben que la felicidad es un estado en el que se elige estar. Antes de acostarse, los exitosos repasan lo que harán el día siguiente, y también enumeran las cosas por las cuales se sienten agradecidos y bendecidos. Y así encuentran la inspiración para hacer las cosas mejor cada día. En el cuaderno-diario que siempre te sugerimos tener, escribe cada día antes de acostarte tres cosas por las cuales estás agradecido. Puede ser cualquier cosa, desde un favor que alguien te hizo, hasta una sonrisa que te regalaron, hasta un llamado de alguien de quien no sabías hace mucho.
Las personas eficaces son generosas con las personas a su alrededor. A pesar de todo lo arduo que trabajan encuentran el tiempo para fortalecer sus vínculos con amigos y familia, ayudando cuando puedan sin esperar nada a cambio. Saben que por más dólares que acumulen en el banco, sin el amor y cariño de su gente no tienen nada.
La mayoría de los líderes a los que deseas imitar tuvieron un mentor, durante las instancias iniciales de sus carreras. Como han caminado el camino antes que ellos, el mentor les ayudó a ahorrar tiempo y dinero, acelerando sus respectivas curvas de aprendizaje. Por eso, fíjate con atención a tu alrededor y piensa si de todos los líderes que conoces hay alguno al que admiras lo suficiente como para pedirle que te mentoree. Una figura como esa estará deseosa de compartir contigo su valiosa experiencia. ¡Así que aprovéchala!
Las personas exitosas aman la excelencia y odian el trabajo mediocre. Por eso, hacen lo que se les pide y más, entregando un plus que deja huella en todo lo que emprenden. Nadie les pide ese extra, simplemente les nace hacerlo así. Ellos saben que tal manera de trabajar es la que los llevará a ser mejores cada día.
Muchos líderes empresariales trabajando durísimo toda la semana, a veces con horarios inhumanos. Pero los fines de semana es todo de ellos. Y aunque algunos siguen trabajando un poquito los sábados y otros se escapan del mundo con sus familias, todos tienen algo con común. Los domingos los utilizan como su día especial para reflexionar sobre lo sucedido, analizar posibles escenarios y armar su estrategia para el resto de la semana. Tú puedes hacer lo mismo con tus fines de semana, y así los convertirás en tu arma secreta. De paso, evitarás la famosa depresión de los domingos por la tarde.
***Para hacer una práctica en Nueva York, Australia, Londres o Hong Kong es indispensable el conocimiento avanzado/nativo del inglés. Para hacer una práctica de consultoría en España o Colombia no es obligatorio.***
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